1.Busque la etiqueta LOW-E: Los fabricantes suelen colocar una etiqueta o logotipo LOW-E en las ventanas y puertas equipadas con este vidrio. Esta etiqueta indica el cumplimiento de las normas de eficiencia energética y garantiza a los consumidores su presencia.
2.Realice una prueba de luz: Apoye un bolígrafo o una linterna sobre la superficie del vidrio. Si observa un ligero reflejo o neblina, esto sugiere la presencia del revestimiento LOW-E. Este revestimiento reduce la ganancia de calor solar y bloquea el paso del sol. Este revestimiento reduce la ganancia de calor solar y bloquea los rayos UV nocivos sin comprometer la visibilidad.
3. Compruebe el valor U: El vidrio LOW-E suele corresponderse con un valor U inferior, lo que indica unas propiedades aislantes superiores. Revise las especificaciones del producto o consulte con el fabricante para determinar el valor U de sus puertas y ventanas.
4. Infórmese sobre el coeficiente de ganancia de calor solar (SHGC): Los vidrios LOW-E suelen presentar un SHGC reducido, lo que indica su capacidad para minimizar la ganancia de calor de la luz solar. Confirme el SHGC de sus ventanas y puertas para evaluar su potencial de ahorro energético.
5. Busque ayuda profesional: Si no está seguro, pida consejo a un experto certificado en ventanas y puertas. Pueden evaluar las instalaciones existentes y proporcionar información sobre la presencia de vidrio BAJA emisividad basándose en indicios visuales e indicadores de rendimiento.
En conclusión, identificar si sus puertas y ventanas incorporan vidrio BAJA emisividad implica una combinación de inspección visual, evaluación del rendimiento y verificación del fabricante. Si se familiariza con estos métodos, podrá tomar decisiones con conocimiento de causa para mejorar la eficiencia energética y el confort de sus espacios vitales.